Como una postal de un rojizo horizonte
te vi una mañana cuando el sol salía,
con lágrimas de oro lloraban las nubes
la ausencia lejana del tren y las vías
En tu gigantesco galpón ferroviario
guardas las nostalgias de nuestros abuelos
que poniendo el hombro con garra y esfuerzo
levantaron estibas para tu progreso.
En la pasarela de tus callecitas
viste el desfile de tus fundadores
de dinamarqueses, gallegos y tanos
que unieron sus manos para engrandecerte.
De vascos y gringos con manos curtidas
que curaron la herida de su triste pasado
empuñando el arado dieron vuelta la tierra
olvidando las guerras con pan y trabajo
De turcos gritones que con sus pregones
desataron nudos de raza pujante.
Con sudor ambulante abrieron atados
y sacaron sus tiendas, barracas, mercados.
De los changarines que pisando charcos
hundieron sus pies en el crudo fango,
para que hoy retumbe en un firme acento
en tu pavimento un zapato lustrado
El desfile sigue con tu muchachada,
juventud pródiga que será tu guía de luz y esperanza.
Con las palomitas blancas y radiantes
que todos los días rompen el silencio,
con coros de risas y su andar de prisa
rumbo a los colegios
En tus callecitas seguirá el desfile
de tu gente soñando con hacerte grande
y un eco grabado de este centenario
quedará en tu historia, JUAN N. FERNÁNDEZ
Elías R. Leguizamón