(19 / VII / 2012) Está ubicada sobre la calle 35, entre 30 y 32. Hace tiempo fue la Dependencia Policial durante muchos años.
El titular de Defensa Civil, Juan D. Llorens se hizo presente. "Se cree que la usan los delincuentes", dijo la Delegada Municipal.
 

En la mañana de hoy se hizo presente el Director de Defensa Civil a quien acompañó la Delegada Municipal, Norma Alí, a raíz de un expediente iniciado, ante la Dirección de Seguridad Pública, por quejas de vecinos recogidas y denunciado posteriormente por la Asociación Vecinal.

La inspección ocular de la recorrida por el inmueble abandonado, le dio a Llorens un panorama muy preocupante y la razón a los vecinos y a la entidad vecinal. "Es una propiedad abandonada, con serios peligros de derrumbe, adentro y en la vía pública", explicó el funcionario.

La Delegada Municipal explicó que inició un expediente a raíz del estado del inmueble y que el propietario o persona que está a cargo nunca la han podido encontrar ni tampoco ha respondido a las citaciones por carta documento.

"Lo que hemos visto adentro es un lugar donde, por estar abandonado, lo usan los malvivientes para acceder a las propiedades lindantes y esconderse, además de ser un criadero de todo tipo de alimañas, especificó la Delegada.

Llorens dejó en claro el buen manejo de la situación por parte de la encargada de la Delegación Municipal, visto que "inició un expediente, como corresponde, cumplió con todas las normativas y hoy estamos aquí para emitir un informe con el cual se tomarán las medidas adecuadas".

En cuanto a qué medidas se pueden tomar luego de esta visita de Defensa Civil, su Director consideró que "la primera y la ideal sería que el propietario se haga cargo como corresponde y ponga esta propiedad en condiciones. Otras serían clausurarla o tomar posesión por falta de pago y abandono", indicó Llorens.

Hace mucho tiempo que la Asociación Vecinal se viene ocupando de estas propiedades abandonadas que causan trastornos a los vecinos. Es la primera vez que se va a tomar una medida ejemplar.

Es de esperar que continúen con estas inspecciones y que se sigan tomando medidas de este tipo para que los propietarios tomen conciencia que, aunque no residan en ella o no la tengan cerca, con el abandono y la desidia perjudican a sus vecinos.